Una vez viví en un mundo de juguete...

Una vez viví en un mundo de juguete, donde cielo era azul y las cosas no estaban como hoy...

Digamos que lo poco que recuerdo era que todo era realmente increíble, todos eramos impresionantemente unidos pues coincidiamos en una cosa, eramos juguetes. Literalmente todo era "color de rosa", no había pleitos más que por cosas sin sentido, que si se me había despintado un poco de la mano, que si me había descosido un poco... no podíamos tener "juguetitos" así que ese tipo de broncas no existían... ustedes entienden a lo que voy...

Lo genial es que en ese mundo de juguete incluso estudiar era sumamente sencillo, las cosas eran básicas e incluso mi maestro de derecho hacía examenes fáciles (si como no...) todo puede sonar muy estúpido, pero pues... eramos juguetes... no hay mucho de que preocuparse. Ahí siempre pude dedicarme a lo que me gustaba, eso de la filmación de películas, todo inventado y nada real... crear un mundo paralelo que te sacaba de la realidad... fue ahí donde comenzé a crear un mundo en el que no todo era color de rosa, un mundo con sentimientos diferentes y extraños... por que en mi calidad de juguete no podía expresar ni sentir lo mismo que los demás... el cine me permitía eso, escapar de mi realidad y acercarme a unos sentimientos que por temor yo no quería o no podía vivir...

Una vez viví en un mundo de juguete, el sol brillaba y mis reuniones muy a la "Toy Story" eran el pan nuestro de cada día... había mucho tiempo libre y podía dedicarme a hacer muchas cosas, escribir, platicar con los amigos, estudiar, filmar, de todo un poco... incluso leía diario y créanme, eso, es decir mucho... la música estaba escrita en notas que hoy no recuerdo, notas que jamás un humano podría leer, pero la melodía jamás, jamás saldrá de mi mente.

Lo difícil fue toparse con la realidad, la realidad difícil... todos eramos así por una simple razón, no podíamos sentir... fue ahí cuando me encontré en un serio dilema, realmente no habíamos sentido nada, no existía aquella amistad... mis películas eran realmente malas, no expresaban nada... el cielo era tan azul, y no había quién pudiera admirarlo y apreciar la belleza... no sentíamos nada por que... eramos de juguete... todo lo que habíamos hecho había sido en vano, vivíamos en una especie de hipocresía (que finalmente no lo era) de la cual no podíamos salir... no había escapatoria...

Me vi al espejo, me di cuenta que el incluso repasar la historia antes de salir a escena me ponía nervioso, me llamaron al 3º acto... salí al escenario y una vez más, enfrenté al público quién al final... me aplaudió de pie... tal y como lo esperaba...

The Show Must Go On....

Una vez viví en un mundo de juguete, donde cielo era azul y las cosas no estaban como hoy...